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Ahora, llega el momento de adentrarnos en un tema, creemos importante y necesario, que todavía no habíamos tratado, el de la composición de las Algas.
Mucho hemos hablado ya de las algas, de su procedencia e historia, de sus propiedades culinarias, de su uso en cosmética y cuidado corporal.
También hemos detallado algas importantes en la cocina asiática y europea, comentado propiedades y beneficios de macroalgas (como la Laminaria de Noruega, el alga KELP, entre otras) y de microalgas (como la Chorella, la Espirulina y la Haematococcus Pluvialis).
Hemos analizado también muchas de las propiedades que las algas, en general, tienen para combatir virus determinados y problemas respiratorios.
Previo a entrar en la composición, veamos cuáles son los ámbitos de acción de las algas (Barbosa, Coutinho, Costa y Reis, 2019; Fitz-Gibbon, Chiu, Nguyen, Du, Liu, et al. (2013; Mohamed, Hashim y Rahman, 2012), con el fin de comprenderlas mejor y en todo su significado:
- Ámbito climático:Gracias a su alto contenido en clorofila, las algas transforman (con ayuda del sol) el gas carbónico y el agua en Oxígeno y en Glucosa. Este proceso, denominado fotosíntesis, es el factor que permite que la vida se desarrolle sobre la tierra. Las algas extraen CO2 de la atmósfera y expulsan oxígeno y gases sulfurosos que propician la condensación de las nubes. De esta manera, las algas contribuyen a: a) regular el clima; b) disminuir el efecto invernadero; y c) depurar el aire que respiramos.
- Ámbito nutricional y dietético: En realidad, las algas constituyen un alimento sano y completo, ideal para los momentos que vivimos, en los que los malos hábitos dietéticos, los alimentos procesados y el uso de sustancias químicas en la agricultura desvirtúan el sentido de la nutrición y debilitan nuestro organismo. Y, además de ello, las algas nos revitalizan y rejuvenecen: tienen todos los nutrientes básicos que necesitamos, nos depuran por dentro, y nos ayudan a conservar la salud. Si a eso sumamos que pueden llegar a ser apetitosas, estamos entonces delante de unos organismos que pueden llegar a resolver muchos de los grandes problemas que tiene el mundo ahora mismo (a nivel nutricional, a nivel atmosférico, y a nivel sostenible, entre muchos otros).
- Ámbito gastronómico: La gastronomía de los pueblos que las consumen desde hace miles de años, ha demostrado sobradamente que son exquisitas y adecuadas para la preparación de muchísimas comidas y bebidas.
¿QUÉ CONTIENEN LAS ALGAS?
Para Hipócrates, médico griego del siglo IV antes de Cristo y considerado el padre de la Medicina, “nuestro alimento debería ser nuestra medicina”.
En el caso de las algas, es muy difícil separar el valor nutricional del valor terapéutico que poseen.
Por ser uno de los alimentos más nutritivos del planeta, resultan ideales tanto para prevenir como para combatir enfermedades. Por ello, a continuación, vamos a ver con detalle cuáles son sus valores nutricionales y qué principios activos contienen.
Así pues, y de acuerdo a las principales investigaciones realizadas al respecto, las algas contienen (Neto, Marçal, Queirós, Abreu, Silva y Cardoso, 2018; Kellogg, Grace y Lila, 2014; Barbosa, Coutinho, Costa y Reis, 2019):
Proteínas de fácil asimilación
- Las algas son un alimento muy rico en proteínas, que representan por término medio, el 25% de su peso en seco.
- Algunas especies, según la estación y el lugar de crecimiento, contienen más del 50% de este nutriente.
- Dichas proteínas son especialmente valiosas, ya que contienen gran número de aminoácidos esenciales. Es decir, aquellos que nuestro organismo no puede sintetizar, sino que debe asimilar a través de la alimentación.
- Estos aminoácidos resultan fáciles de digerir debido a la particular composición de las algas, ricas en sales minerales y en algunas enzimas.
- Esto hace que alcancen un coeficiente de digestibilidad de hasta el 95% y que se digieran cuatro o cinco veces más deprisa que las proteínas animales.
- No contienen colesterol, grasas saturadas, residuos de antibióticos, pesticidas ni hormonas de síntesis, como ocurre con las proteínas de la carne.
Ácidos grasos poliinsaturados
- El promedio del contenido en grasas de las algas está por debajo del 5% de su peso en seco, factor que contribuye a su bajo contenido calórico.
- Los lípidos que contienen son, fundamentalmente, ácidos grasos poliinsaturados.
- A nivel terapéutico, estos ácidos:
- Favorecen la permeabilidad de las membranas celulares.
- Transportan el colesterol evitando la formación de placas de ateroma.
- Estimulan la formación de linfocitos.
- Son los precursores obligados de las prostaglandinas.
- Regulan la agregación de las plaquetas en la sangre.
- Reducen la hipertensión.
- Tienen efecto anti-inflamatorio.
- Tienen efecto regulador del sistema inmunitario.
Carbohidratos bajos en calorías
- Las algas son relativamente pobres en carbohidratos y azúcares
- Se consideran, por ello, un complemento ideal en la fase de crecimiento, en períodos de convalecencia, en el embarazo y durante las dietas adelgazantes.
- El carbohidrato mayoritariamente presente en las algas es el Manitol, que es un estimulante hepático y ligeramente laxante, que no incrementa la glucosa en sangre, razón por la cual su consumo es perfectamente apto para diabéticos.
- Se puede afirmar que las algas son un alimento poco calórico, y a nivel terapéutico:
- Sus azúcares son, en su mayor parte, mucilaginosos, es decir, tienen la propiedad de inflarse en el agua, pero no son asimilados por el organismo.
- Esto hace que no se eleve el nivel de azúcar en la sangre y que sea útil para los que sufren de estreñimiento.
- Reduce la toxicidad de los metales pesados a los que estamos expuestos diariamente, como el bario, el cadmio y el zinc.
En resumen, el consumo de algas se ha disparado en los últimos años porque sus cualidades gastronómicas y dietéticas son evidentes cada vez más (Lanes, Bizuayehu, Fernandes, Kiron y Babiak, 2013). Se las considera un alimento equilibrado de bajo contenido calórico que proporciona nutrientes esenciales. Porque, como coinciden todas las investigaciones, las algas son ricas en (Rioux, Turgeon y Beaulieu, 2007):
- Vitamina A (mantiene la visión, la piel y las mucosas),
- Vitamina B1 (regula el sistema nervioso y permite que los hidratos se conviertan en energía),
- Vitamina B2 (ayuda a la formación de glóbulos rojos),
- Vitamina C (cuida el cartílago y el hueso),
- Vitaminas D, E y K (necesarias para el buen funcionamiento de todos y cada uno de los órganos vitales del cuerpo humano)
- Algunos minerales como calcio, potasio, fósforo, yodo, hierro y sodio.
Asimismo, también son buena fuente de fibra, tienen efecto depurativo, favorecen la evacuación y sacian, lo que las hace muy apropiadas para dietas de adelgazamiento.
Referencias
Barbosa, AI., Coutinho, AJ., Costa, SA. y Reis, S. (2019). Marine polysaccharides in pharmaceutical applications: Marine Polysaccharides in Pharmaceutical Applications: Fucoidan and Chitosan as Key Players in the Drug Delivery Match Field. Marine Drugs, 17(12), pii:E654.
Fitz-Gibbon, TS., Chiu, BH., Nguyen, L., Du, C., Liu, M., Elashoff, D., Erfe, MC., Loncaric, A. et al. (2013). Propionibacterium acnes strain populations in the human skin microbiome associated with acne. J. Invest. Dermatol. 133(9), 2152-2160.
Kellogg, J., Grace, MH. y Lila, MA. (2014). Phlorotannins from Alaskan Seaweed Inhibit Carbolytic Enzyme Activity. Marine Drugs, 12(1), 5277-5294.
Lanes, CF., Bizuayehu, TT., Fernandes, JM., Kiron, V. y Babiak, I. (2013). Transcriptome of Atlantic cod (Gadus morhua) early embryos from farmed and wild broodstocks. Marine Biotechnology, 15(6), 677-694.
Mohamed, S., Hashim, SN. y Rahman, HA. (2012). Seaweeds: A sustainablefunctional food for complementary and alternative therapy. Trends in Food Science and Technology, 23(2), 83-96.
Neto, RT., Marçal, C., Queirós, AS., Abreu, H., Silva, AMS. y Cardoso, SM. (2018). Screening of Ulva rigida, Gracilaria sp., Fucus vesiculosus and Saccharina latissima as Functional Ingredients. Int. Journal Mol. Sci., 30(2), 10-19.
Rioux, L., Turgeon, SL. y Beaulieu, M. (2007). Characterization ofpolysaccharides extracted from brown seaweeds. Carbohydrate Polymers, 69(3), 530-537.